El Plan de Recuperación de Vagones, Locomotoras y Vía Férrea marcha a todo tren, con el objetivo de incorporar nuevos equipos rodantes a la línea de producción de CVG Ferrominera Orinoco, que son vitales para el incremento de la producción de mineral de hierro y prerreducidos.

En diciembre de 2018 la estatal minera contaba con 332 vagones, ahora tiene 977 unidades disponibles; es decir, que con el ímpetu y mística de trabajo de la clase obrera se ha logrado recuperar 697 vagones góndola y tolvas autodescargables. “Este es un logro muy importante por que cada equipo que se recupera significa 89 toneladas más si son vagones góndolas y 90 toneladas adicionales si son vagones tolva. Cada vagón es importante en el incremento de la producción y la productividad por trenes”, resaltó Aldo Cantafio, gerente general de Operaciones de CVG FMO.

Actualmente, la Gerencia de Ferrocarril continúa el plan de recuperación con la intervención de 123 vagones adicionales. Cabe destacar que del 2018 al 2021 se ha incrementado la flota en 194% de vagones operativos, que cada tren lleva a Ciudad Piar, se carga y regresa a Puerto Ordaz para ser volteado y procesado.

Asimismo, Cantafio destacó la llegada de recursos económicos para seguir incrementando la flota de vagones; mientras que las unidades de locomotoras se han incrementado en 500%, es decir, en 2018 habían tres equipos, hoy contamos con una flota de 18 locomotoras grandes y pequeñas recuperadas, que cubren las líneas de Puerto Ordaz y las que van a la mina y regresan.

Visto el sistema de producción de CVG Ferrominera Orinoco como un proceso integral, se suma otro aspecto de vital importancia como es la eliminación de las reducciones en la línea férrea principal en los kilómetros 16, 42, 48 y rehabilitación de puentes, que impiden o demoran los trenes en su transito por las diferentes rutas de despacho. “De este modo estamos dándole mayor confiabilidad, seguridad y productividad a la línea férrea, minimizando los tiempos de viaje”, aseveró el gerente general de Operaciones.

El Nuevo Modelo de Gestión Socialista motoriza el reimpulso de la producción de la industria del hierro, sostenido en la mística de trabajo e inventiva de la clase trabajadora y la sustitución de importaciones, como principales eslabones de la cadena de producción de siderúrgica de Venezuela.